Los primeros dientes en aparecer generalmente son los dos dientes frontales inferiores, los incisivos frontales inferiores. Un mes o dos meses después, suelen salir los cuatro dientes frontales superiores (incisivos frontales y laterales superiores) y en torno a un mes después, aparecerán los incisivos laterales inferiores.
Hasta que el diente logra romper la encía, tu hijo pueden pasar unos días de peor humor o incluso con fiebre. La salida de los dientes también puede provocar alteraciones en la alimentación o incluso en el sueño.
Hay algunos síntomas que te ayudarán a saber que a tu bebé está a punto de salirle el primer diente:
- Babea más de la cuenta.
- En muchas ocasiones, la salida de los dientes se acompaña de la aparición de cacas ácidas que provocarán que su culete se escueza con más facilidad.
- También es posible que le coincidan con un cuadro vírico o un aumento de su temperatura corporal.
- Se lo lleva todo a la boca y lo muerde con mucha fuerza.
Debes estar atenta a estos síntomas o a su irritabilidad para poder paliar en lo posible sus molestias.
Para el dolor producido por la erupción de los dientes hay algunos remedios: analgésicos que se aplican directamente en la encía o que se les puede administrar oralmente; antiinflamatorios para aliviar la hinchazón de las encías; mordedores para favorecer la erupción de los dientecitos, o cualquier objeto, juguete o alimento que puedan morder sin peligro. Todo esto puede suponerles un gran alivio para las encías.