Cómo estimular a tu bebé de 3 a 6 meses
Este artículo trata de:
Tu pequeño ya no es un recién nacido, y su mundo de experiencias se amplía más cada día que pasa. Aquí te damos algunos consejos para estimular los sentidos del bebé entre los 3 y 6 meses y ayudarlo a desarrollar su psicomotricidad.
Índice de contenidos
Estimular el lenguaje del bebé de 3 a 6 meses
Posiblemente, tu pequeño ya esté comenzando a vocalizar, es decir, a producir algunos sonidos con su voz que no tienen que ver con el llanto. Cada vez que lo escuches, prueba a sonreírle y repetir esos mismos sonidos. Algo importante es que te tomes tu tiempo para escuchar al bebé, sin interrumpirlo. Esto le irá indicando que lo que produce con su voz es muy importante y que merece tu atención.
Por supuesto, es fundamental que continúes hablándole constantemente: describe lo que haces en el momento de cambiarle el pañal, de bañarlo o de hacer las tareas de la casa.
Estimular al bebé de 3 a 6 meses con juegos de palmas
Otra manera de estimular a tu bebé entre los 3 y los 6 meses es con el juego. Cuando tu bebé esté en brazos de tu pareja o de otro familiar, apoya tus palmas en las suyas mientras le cantas “palmitas” o alguna otra canción. También puedes mirarte al espejo mientras tienes al bebé en brazos, señalarlo, o apoyar su manita contra el cristal (pero no esperes que siendo tan pequeño pueda darse cuenta de que es su propia imagen la que está tocando, porque faltan muchos meses para que llegue a reconocerse). Otro ejercicio consiste en cogerle suavemente las manitas y juntarlas, hasta que se toquen la una con la otra.
En el suelo
Antes de los 6 meses, un bebé es demasiado pequeño para desplazarse o para permanecer sentado (por lo menos, mucho rato). ¿Dónde ubicarlo cuando no puedes tenerlo en brazos? El mejor lugar no es una sillita, un arnés ni un sofisticado gimnasio, sino simplemente el suelo. Es muy importante que le des a tu bebé oportunidades para moverse libremente.
No lo fuerces a voltearse boca abajo ni lo coloques en posiciones a las que no llega por sí mismo, pero sí ofrécele algunos juguetes seguros, de diferentes colores y texturas, para motivarlo a estirar sus brazos y tratar de cogerlos. Si no quieres apoyarlo directamente en el suelo o hace mucho frío, déjalo sobre una manta, una toalla o una sábana bien limpias.
Sobre la barriguita
Si bien no deberías forzar al bebé a permanecer boca abajo (sobre todo si ves que se irrita o que está incómodo) esta posición lo ayuda a fortalecer los músculos del cuello, los hombros y la espalda. Prueba colocarlo sobre tu propio estómago o tu pecho estando tú acostada en el suelo. Puedes cantarle, elevar un poco sus bracitos y jugar con él.
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