¿Qué son y para que se usan las muselinas para el bebé?

Hablamos de las muselinas, uno de esos objetos que nos hace la vida más fácil cuando estamos con el bebé. Pero, ¿Qué son y para qué se usan las muselinas?

¿Qué es una muselina?

La muselina es una tela bastante fina y transpirable que fue inventada en Bangladesh hace varios siglos. Están confeccionadas en hilo de algodón y son telas elásticas, lo que las hace ideales para el arrullo de nuestro bebé.

Arrullar a los bebés es algo que se lleva haciendo desde el inicio de los tiempos y esa “tradición” atemporal se ha visto reforzada gracias a las conclusiones de los expertos, quienes explican que envolver a los bebés hace que éstos tengan un sueño más plácido. También se previenen los movimientos espontáneos o que se despierten continuamente durante la noche.

¿Para qué se usan las muselinas de bebé?

Las muselinas ofrecen un gran número de usos diferentes. Los bebés la agradecen muchísimo, porque les recuerda la época en la que sus orígenes se remontan al útero materno.

• La muselina para el bebé sirve para utilizarla como soporte o cambiador improvisado. Seguro que en más de una ocasión habéis necesitado tumbar al bebé en alguna superficie pero puede que esta no estuviese demasiado limpia. En este caso la muselina nos permitirá mantener siempre limpio al bebé.
• También sirven las muselinas para envolver a los bebés y que puedan dormir cómodamente mientras los llevamos en brazos. Además, el hecho de que estén envueltos, no quiere decir que vayan incómodos, sino todo lo contrario.
• En un viaje en coche las muselinas servirá para proteger a los bebés del aire acondicionado. Además pesan y ocupan muy poco, con lo que podremos llevarlas en cualquier lugar, incluso en el bolso.
• También pueden ser utilizadas para evitar que los bebés nos manchen cuando devuelvan y los tengamos en brazos.
• Otro de los usos de las muselinas para bebés es protegerlos del sol cuando los llevemos en su sillita de ruedas, para limpiar la piel del bebé o como toalla para después del baño, como protector para el cambio de pañal, como sábana bajera, para proteger a la mamá cuando da el pecho o incluso como manta para el suelo.

 
Ahora que ya sabes lo que son y para qué sirven las muselinas para el bebé, seguro que no tardarás en hacerte con una y aprovecharte de todas las ventajas que ofrecen.