¿Cómo afecta el embarazo a los sentidos ?
La primavera la sangre altera, dice el refrán. ¡Y el embarazo también! Los niveles hormonales se disparan con la gestación provocando cambios en la composición química de la sangre que afectan a los sentidos. Olfato, gusto, tacto, y en menor medida oído, se agudizan y las futuras mamás perciben todo con mayor intensidad y emoción.
Índice de contenidos
¿Cómo afecta el embarazo a los sentidos?
Olfato
Ahora huelo más que nunca» o “No aguanto ese olor” son expresiones frecuentes entre las embarazas. No es casual. La razones son por un lado, el elevado nivel de progesterona y estrógenos en la mujer y por otro, que las hormonas aumentan la irrigación de las las membranas de las fosas nasales. El resultado es que el olfato se agudiza haciendo que se perciban olores que antes pasaban inadvertidos.
Este exceso olfativo puede provocar antojos, si el olor nos agrada, o nauseas, si el olor nos molesta y esto tampoco es casual. Tiene que ver con un sistema de autoprotección de la madre que se activa para defender a su bebé contra sustancias tóxicas que puedan perjudicar su desarrollo..
Esta alteración fisiológica tiene un nombre científico, hiperosmia, que era el trastorno que tenía Garrapata Grenouille, el protagonista de El Perfume, novela de Patrick Süskind.
Gusto
La potenciación del sentido del olfato en las embarazadas lleva consigo cambios en otro sentido: el gusto que suele ser una de las primeras señales del embarazo. Aquí también se produce una auténtica revolución corporal. Cuando hacemos la digestión producimos ácido clorhídrico y cuando se está embarazada este disminuye, lo que a veces provoca un sabor metálico que altera el sabor de lo que la mujer come. Para compensarlo el cuerpo pide a las embarazadas alimentos ácidos como el limón, los encurtidos o las manzanas verdes , por ejemplo.
Además, durante el embarazo aumentan los niveles de la hormona gonadotrofina coriónica lo que modifica los sabores y hace que las embarazadas tengan ciertos antojos alimenticios.
Asímismo la composición química de la sangre cambia con el aumento de los niveles hormonales lo que se refleja en la saliva, provocando variaciones en el gusto de la embarazada y haciendo que algunos alimentos le resulten desagradables.
Tacto
Los cambios en la piel de las mujeres embarazadas también son uno de los primeros síntomas de la gestación. Esto se debe a que en esta etapa la piel está más vascularizada, es decir que hay más sangre en la superficie, lo que genera más sensibilidad.
Vista
También resultan curiosos los cambios que se producen en el sentido de la vista en las embarazadas. No siempre sucede pero en ocasiones la visión disminuye, se vuelve borrosa y les cuesta enfocar los objetos, sensaciones que desaparecen después del parto.
Una vez más las responsables son las hormonas. La progesterona y la relaxina provocan un aumento de la retención de líquidos lo que afecta a la córnea de los ojos y al cristalino.
Oído
El sentido que sufre menos cambios durante el embarazo es el oído. Sin embargo los sonidos fuertes y estridentes molestan al feto e incrementan su ritmo cardiaco. Por ello es conveniente durante los meses de gestación huir de los ambientes ruidosos y buscar tranquilidad y sonidos agradables.
Gana una canastilla con productos imprescindibles para tu bebé. Sorteamos 30 cada mes.
¡CONSIGUE LA TUYA!