Reducir abdomen después de una cesárea
Recuperar la figura tras el parto lleva su tiempo, y más si el nacimiento de tu bebé fue cesárea. El abdomen es una de las zonas que más se resiste.
No te dejes impresionar por las fotos de las modelos que salen del hospital con sus bebés como si fuesen a hacer un anuncio de bañadores la semana que viene: la recuperación del cuerpo tras el embarazo y el parto es un proceso que puede llevar un año.
En un parto por cesárea, además, la incisión se cortan cinco tejidos distintos: piel, grasa subcutánea, aponeurosis muscular y peritoneo parietal. Los músculos abdominales no se cortan, pero se desplazan. Y la sección de estos tejidos afecta a la circulación sanguínea de la zona. Esto significa no solo que puedes sentir hormigueo o falta de sensibilidad alrededor de la cicatriz durante varias semanas, sino que puedes tener más tendencia a retener líquidos en la tripa de aquí en adelante.
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Cuándo empezar a hacer ejercicio tras una cesárea
Generalmente, los médicos aconsejan esperar de seis a ocho semanas antes de empezar a hacer ejercicio. Otra cosa es caminar y dar paseos, puedes comenzar antes y te ayudará a tonificar y fortalecer tu cuerpo y a sentirte anímicamente mejor. De todas formas, antes de hacer nada consulta a tu médico o tu matrona, cada mujer y cada parto son un mundo.
¿Qué ejercicios ayudan a tonificar el abdomen?
Recuerda que aquí, como siempre, la constancia es la mejor garantía de triunfo. Empieza poco a poco para ir ganando fondo sin forzarte, y evita los deportes y actividades de impacto. Estos son algunos de los ejercicios que te ayudarán a mejorar el estado de tu tripita tras la cesárea.
Caminar
Parece que vale para todo, pero es que sí, vale para todo. Empieza poco a poco, en terreno llano, y sin hacer grandes esfuerzos. Si sales a andar a diario, irás ganando fuerza para alargar el recorrido, acelerar y practicar otros ejercicios. Además, puedes hacerlo llevándote a tu bebé en el carrito.
Abdominales hipopresivos
La gimnasia abdominal hipopresiva consiste en contraer los músculos de una forma concreta, con ayuda de la respiración. Hay que realizarlos siempre con la ayuda de un profesional. Son respetuosos con el suelo pélvico y no tienen nada que ver con los ejercicios abdominales tradicionales, que no suelen recomendarse antes de los seis meses.
Ejercicios de Kegel
Ayudan a tonificar y recuperar la musculatura del suelo pélvico, pero también los músculos de la pared abdominal. Recuerda que no deben empezarse hasta terminada la cuarentena.
¿Cómo puede ayudar la alimentación a reducir el abdomen?
Una vez más, hacemos un llamamiento a las soluciones individualizadas y al asesoramiento profesional. El posparto es un momento delicado y no conviene que hagas dieta por tu cuenta y riesgo. Pero sí hay normas generales que ayudan a recuperar la figura y no entrañan ningún peligro: dar el pecho a tu hijo, no saltarse ninguna comida, tomar alimentos ricos en fibra como legumbres, hortalizas y frutas, evitar las harinas refinadas, las salsas y el azúcar, beber abundante agua… En fin, en este asunto da igual que hayas pasado por una cesárea o no, para adelgazar hay que comer de manera saludable, en cantidades no excesivas, y evitar el picoteo y los platos precocinados, con mucha grasa o con exceso de sal o con azúcar.
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