¿Qué tradiciones navideñas tenéis en casa? Ideas para repetir año tras año
Sobre el tapiz de las tradiciones navideñas compartidas por tantos de nosotros, cada familia teje sus propias particularidades para hacerse unas fiestas a medida, llenas de pequeños detalles que se repiten cada año y que forman parte del acerbo emocional de nuestros hijos.
Aquí van algunas ideas:
–Comprar (o hacer con nuestras propias manos) una figurita para el belén o un adorno para el árbol cada año. Las visitas a los mercadillos navideños o a esa tienda de toda la vida y la tarde de manualidades en el puente de diciembre se pueden convertir en un clásico familiar.
–Hacernos una foto de familia muy navideña. Seria o en broma; en casa o en un estudio fotográfico; disfrazados o vestidos de gala. Un gran recuerdo y una manera de felicitar el año a nuestros seres queridos.
-Dibujar nuestro propio Christmas. Ceras, pintura de dedos, recortes de papel… Será precioso ver la evolución de las obras de arte de los niños año tras año.
-Ir a ver todos juntos ese belén tan bonito. Puede ser el belén viviente de la ciudad, con ovejitas y todo, ese otro gigante con figuras que se mueven y un río de agua de verdad o el que montan en un pueblo cercano. Cada año los niños descubrirán nuevos detalles y siempre les podemos explicar cosas distintas.
-Hacer galletas. Un clásico maravilloso. Podemos quedar con amiguitos o con los primos una tarde al principio de las vacaciones de Navidad para esto. Se hornean muy rápido y los niños pueden ayudar a mezclar los ingredientes, amasar, cortar la masa con los moldes y decorar las galletas. Podemos guardarlas en cajitas o bolsitas decoradas por nosotros mismos para regalar a abuelos y amigos.
-Poner música de villancicos en casa y aprendérnoslos. Y cantarlos todo el rato, por supuesto.
– Visitar un museo divertido. En Navidad, muchos museos organizan talleres para niños o familias, cuentacuentos o visitas guiadas especiales. Infórmate de lo que se cuece en los museos de tu ciudad y reserva con tiempo, porque las entradas suelen acabarse enseguida.
-Hacer una cápsula del tiempo. En una caja, podemos meter cada año la huella de la mano del niño sobre un papel, un mechón de pelo, un calcetín de este año que se le haya quedado pequeño, escribir los hitos o los acontecimientos importantes que ha habido ese año en la vida del niño y de la familia… Al año siguiente, la abrimos para ver lo que hay y creamos la nueva cápsula.
-Escribir nuestra lista secreta de deseos para el Año Nuevo cada Nochevieja… Y guardarlos hasta el año próximo.
-Ir a ver a Papá Noel o a los Reyes Magos. ¿Qué les contaremos este año?
-Ver “nuestra” película de Navidad. Sí, todos los años ponen miles de películas de temática navideña en la tele, pero ¿cuál es la preferida de tu familia? Qué bello es vivir, Pesadilla antes de Navidad, Love Actually, El Grinch, Polar Express, Solo en casa… Las opciones son infinitas.
-Jugar a juegos de mesa o con la consola en familia. Sí, lo podemos hacer todo el año, pero en Navidad nos juntamos mucha más gente y es mucho más divertido. ¿Un duelo de karaoke por equipos? ¿Una partida de la oca? ¿Una brisca, para recuperar los naipes de toda la vida? ¿Una competición de baile?
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