Alimentación ecológica o BIO para niños

Según las estadísticas de consumo de productos ecológicos, en las familias que se come ECO se recicla, se usa menos el coche y se hace más deporte que en el resto de la población. De esto se desprende que una alimentación ecológica o Bio entra dentro de un estilo de vida sano tanto para adultos como para niños. Además, con el consumo de productos Bio contribuimos a ser más respetuosos con el medio ambiente.

Respecto a la pregunta de si los productos BIO son más sanos que los normales, todavía no hay una respuesta concluyente. Según un estudio publicado en la revista British Journal of Nutrition, la leche procedente de ganadería ecológica tendría un 50% más de grasas saludables que la normal, pero el porcentaje de yodo presente sería un 74% más bajo. Respecto a las hortalizas, parece que las ecológicas serían más ricas en hierro y fósforo, además de aportar sustancias antioxidantes.

La ganadería ecológica

Para que la carne que llega a los puntos de distribución pueda tener el sello ECO o BIO tiene que cumplir una serie de requisitos, entre los que se encuentran:

• El número de animales por granja está limitado para evitar el pastoreo excesivo y las enfermedades que trae consigo el hacinamiento.
• Su alimento tiene que ser pienso ecológico al 100% o hierba de la zona.
• Está prohibido utilizar hormonas para acelerar el crecimiento. Además, el uso de antibióticos solo se permite en casos muy puntuales.

La agricultura ecológica

Del mismo modo, los productos vegetales de origen ecológico deben tener ciertas características, como:

• Las semillas tienen que haber sido producidas orgánicamente.
• Está prohibido el uso de fertilizantes químicos: para aumentar la fertilidad del suelo se usan los propios organismos de la tierra (bacterias, hongos…), la rotación de cultivos y el estiércol.
• Para controlar las plagas no se pueden usar pesticidas o herbicidas sintéticos, pero sí procesos térmicos o enemigos naturales de las plagas como los insectos.

Tipos de alimentos

Tanto en supermercados como en tiendas especializadas en productos ecológicos, podemos encontrar una gran variedad. Los grupos de alimentos principales serían:

Frutas y verduras: Muchos adultos que se han pasado a lo ECO hacen referencia a que el sabor y la forma de los productos ecológicos les recuerda a “los de antes”, los que comieron en su infancia. Sea ecológica o no, los niños deberían acostumbrarse a comer frutas y verduras de temporada recogidas a su tiempo para poder apreciar todo su sabor.

Carnes y lácteos: La cría de animales en libertad y alimentándose de la forma más natural posible impacta en la calidad y jugosidad de la carne y sus derivados. Las aves de corral criadas en el suelo producen huevos de la más alta calidad.

Frutos secos: Los frutos secos forman parte de la dieta mediterránea y son una fuente magnífica de grasas saludables, hierro, vitaminas, calcio y proteínas. Consumirlos habitualmente mejora la salud cardiovascular. Eso sí, con los niños menores de seis años hay que tener cuidado al ofrecerlos porque su forma y dureza hacen que haya riesgo de atragantamiento.

Cereales: Los cereales de desayuno son muy socorridos para los niños de edad escolar porque suelen gustarles y se los pueden preparar ellos mismos. Sin embargo, estos productos suelen llevar demasiado azúcar. Podemos recurrir a la avena o al cereal sin más y añadirle nosotros el azúcar para controlar la cantidad o, mejor aún, trozos de fruta fresca o deshidratada. También es buena idea sustituir el pan blanco por pan integral de harina de trigo, espelta, trigo sarraceno…

Beneficios de la alimentación ecológica o bio para niños

Ahora bien, ¿cuáles serían los beneficios más importantes de la alimentación ecológica o Bio para niños? Algunos de ellos son:

• La alimentación ecológica ayuda a disminuir el riesgo de intolerancias alimentarias y alergias en niños y en bebés.
• Son alimentos más nutritivos. Aportan una mayor cantidad de vitaminas, minerales y proteínas, lo que contribuye a que el niño crezca y se desarrolle sano.
• Contribuyen al desarrollo del sistema inmunológico.
• Los niños se acostumbran desde que son bebés a alimentarse de forma sana. Esto a su vez los llevará, posiblemente, a un estilo de vida saludable en su edad adulta.
• Mejor sabor de los alimentos al crecer de forma natural, sin contacto con pesticidas.
• Concienciamos a los niños desde que son pequeños sobre el cuidado del medioambiente y al respeto por los animales.

Pero como siempre decimos, los niños son como esponjas y absorben todo aquello que ven en casa. Si los pequeños ven que los padres se alimentan de forma sana y llevan un estilo de vida saludable, probablemente ellos se preocupen también por un estilo de vida en la que la buena alimentación y el ejercicio sean dos pilares fundamentales.