Cómo elegir bañador según la edad del niño
Este artículo trata de:
No es lo mismo comprar un bañador para un bebé que para un peque que ya ha dejado el pañal o para una niña que ya sabe nadar y tirarse en bomba al agua. Ni hace falta la misma prenda para jugar en la playa que para practicar waterpolo o ir a clase de natación. La variedad que hay en el mercado es enorme, así que vamos a darte las claves para elegir el bañador perfecto dependiendo de la edad del niño:
Índice de contenidos
Cómo debe ser el bañador del niño
- Ante todo, comodidad. Con independencia de la edad del niño, el bañador tiene que ser cómodo. Fácil de poner y quitar, de la talla justa (si es demasiado grande se le caerá y si le queda pequeño le apretará aquí y allá y le resultará molesto) y que les permita libertad de movimientos.
- Atención al tejido: Los bañadores tienen que ser de tejidos transpirables y secarse rápido. Las flores de fantasía, los apliques rígidos o que añaden tela al bañador pueden quedar muy bonitos, pero suelen tardar más en secarse y no son tan cómodos.
- Con uno no basta. Por rápido que se sequen, siempre es conveniente tener, al menos, otro bañador de repuesto, por si el niño se moja a última hora y no queremos que esté húmedo cuando baja la temperatura, para que pueda cambiarse para comer después de estar jugando en el agua o por si nos queremos ir antes de lo previsto de la playa o la piscina.
Bañadores para bebés
Los modelos más indicados son los de braguita. Existen en el mercado bañadores antiescape, impermeables, aunque lo habitual, si el bebé es pequeño, es ponerle un pañal especial para el agua debajo del bañador. Los cambios de pañal serán habituales, así que el modelo que elijas tiene que ser fácil de quitar y poner. A los bebés no debe darles el sol directamente por debajo de los seis meses (debemos elegir una zona de sombra o estar bajo una sombrilla).
Bañadores para chiquitines
Si tu hijo ya corretea solo, necesitará protección extra para el sol. Para minimizar la exposición a los rayos solares, existen bañadores de cuerpo entero o con camiseta incorporada, confeccionados en tejidos que filtran los rayos ultravioleta. Los más cómodos siguen siendo los modelos tipo braguita, también para las niñas, y puedes ponerle una camiseta para que no le de tanto el sol, aunque si se moja le resultará más incómodo. No te olvides de ponerle siempre un gorro o una visera en la cabecita.
Bañadores para niños y niñas mayores
Ya han dejado el pañal, entran y salen del agua todo el tiempo y tienen sus propios gustos. A partir de cierta edad, el modelo de bañador que elijamos dependerá sobre todo de la actividad que vayan a realizar nuestros hijos. Para practicar natación o deportes náuticos, son preferibles los modelos de tipo deportivo, de cuerpo entero para las niñas, con tirantes al hombro y que se sujetan bien en la espalda, y más cortos y ceñidos para los niños, tipo brief, shorts o hammers, más largos pero no holgados.
Pero si estamos pensando en pasar el día en una piscina de recreo o en la playa, las opciones se amplían: los bañadores tipo bermuda, en diferentes largos para los niños, les protegerán más del sol, son más versátiles y se adaptan mejor a los juegos dentro y fuera del agua.
Para las niñas existe una gran variedad: braguitas, culottes, bikinis, trikinis, bañadores con la espalda descubierta… Aquí sí que cabe más fantasía: volantes, lazos, nudos… Si eliges un bikini, asegúrate de que sea cómodo y se mantenga en su sitio sin que tenga que estar pendiente de las tiras o de piezas que se puedan mover.