Pautas para el primer año de cole
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Uno de los momentos más importantes para el niño, y que recordaremos los padres durante toda nuestra vida, es su primer año de colegio. Te damos algunas pautas para comenzar este nuevo desafío para el peque con buen pie.
Índice de contenidos
La adaptación en el primer año de colegio
En algunos colegios, ofrecen la posibilidad de que los pequeños vayan pocas horas durante las primeras jornadas de colegio, incrementando la carga horaria de manera paulatina. Estos periodos de adaptación son importantes para que el niño se habitúe al nuevo espacio y conozca bien a su maestro en su primer año de colegio. Por supuesto que, al tener que trabajar, queremos que el niño cuanto antes realice el horario completo, pero debemos tener paciencia, respetar los tiempos de adaptación, permitir que el niño se exprese –y que llore, si eso ocurre- sin censurar sus sentimientos.
¡Cuántos niños!
Aun si nuestro hijo ha acudido a una guardería desde que era un bebé, el cole “de mayores” supone un shock porque de repente se encuentra rodeado de muchos más niños mayores que él.
Normalmente existe una entrada individual para los más peques. Si no fuese así, es muy común que su entrada y salida se adelante para no coincidir con los más mayores. Les veréis formar filas o ir enganchados (el mítico gusanito). Con respecto a la primaria, en general está ubicada en otro edificio, pero aún si compartiesen espacios, se procura que los horarios de recreo no coincidan.
Organizarse con tiempo
Adiós a la flexibilidad horaria de las guarderías, ahora es más importante que nunca ser puntuales. Salir de casa con anticipación nos permitirá llegar en horario tanto a la entrada como a la salida del cole. También es un buen consejo preparar los útiles escolares y la mochila la noche anterior.
¿Cómo es su jornada en el primer año de colegio?
Las actividades, ahora que nuestro hijo va al cole, están más pautadas que cuando era pequeñito. ¡Esto no quiere decir que no juegue ni se divierta! Pero sí que deberá aprender ciertas reglas, como hacer fila, sentarse en rondo, o esperar su turno para hablar. Es bueno que nuestro hijo tenga recreos al aire libre, pero no olvidéis que también necesita tiempo para jugar cuando regrese a casa. Por eso, este primer año procurad no sobrecargarlo de actividades extraescolares.
¿Debe quedarse a comer en el cole?
Si tienes la posibilidad de que tu hijo coma en casa o que se quede a comer al colegio, considera:
- La distancia del cole a casa: No vale la pena cortar su jornada si se va a pasar ese rato viajando.
- Su autonomía para comer: Si bien los niños están supervisados, nadie le dará de comer a tu hijo si no se alimenta solo.
- Cómo de «quisquilloso» es con los alimentos: Al contrario de lo que podría pensarse, un niño que no come muy bien puede beneficiarse del comedor, aprendiendo por imitación a comer más cosas.
¿Cómo se está preparando vuestra familia para el primer día en el cole?