Qué es la deglución atípica infantil
Este artículo trata de:
A veces los padres detectamos ciertos problemas en los niños que no somos capaces de ponerles nombres, uno de ellos puede ser la conocida como deglución atípica infantil ¿en qué consiste, por qué ocurre, cómo detectarla y cuál es el tratamiento de la deglución atípica infantil?
Índice de contenidos
Cómo detectar la deglución atípica infantil
Normalmente, la deglución atípica infantil se detecta porque los dientes se estropean debido a que no se produce una mordida adecuada, que sería aquella que encaja los dientes de arriba con los de abajo. Esta mordida incorrecta va desgastando los dientes haciendo que se deterioren.
También se suele notar una respiración bucal más habitual que la nasal, así como dificultades en la pronunciación de ciertas palabras.
A grandes rasgos, podemos ver si tiene un problema de deglución atípica si observamos lo siguiente:
- Los dientes superiores están más avanzados o retrasados que los inferiores.
- Mastica con los dientes y no con los molares.
- Suele respirar más por la boca que por la nariz.
- La lengua no descansa detrás de los dientes.
Tratamiento de la deglución atípica infantil
- Dentista: En primer lugar, si observamos que los dientes y la mordida es inadecuada, deberíamos acudir al dentista para que corrija el problema, seguramente con un aparato.
- Logopeda: Para el problema de la pronunciación deberemos acudir a un logopeda que pondrá a nuestro hijo o hija unos ejercicios de sencilla ejecución que le ayudarán a dejar de empujar los dientes con la lengua y a mejorar la pronunciación de las palabras que más le cuestan.
- Debemos prestar atención: No todo el trabajo recae en el trabajo de profesionales, nosotros también podemos ayudar a corregir el problema, por ejemplo evitando que se muerdan las uñas, no dejarle que se chupe el dedo, recomendarle siempre que mastique bien la comida y darle todo tipo de alimentos sin preocuparnos si son duros o blandos.
Motivos por los que ocurre
Son varios los motivos por los que puede ocurrir este problema, a continuación enumeramos los más habituales:
- Uso del chupete o del biberón pasados los 3 años de edad del niño.
- Hábito de chuparse el dedo o morderse las uñas. Este hábito se suele adquirir cuando la alimentación del pecho no es eficaz y el niño se queda con hambre.
- Consumo de alimentos triturados o en papilla más allá de la edad apropiada. En el momento en que se puedan comer alimentos sólidos, la alimentación debería basarse en estos alimentos.
Consejo para los padres
Si detectamos cualquier síntoma de que nuestro hijo pueda estar padeciendo este problema, lo mejor es acudir al pediatra o a los profesionales oportunos para que traten el problema lo antes posible, de este modo se solucionará antes de que se complique más.