En la semana 31 de embarazo, la gestación ya está muy avanzada: cada vez sientes más a tu bebé y, poco a poco, te vas haciendo a la idea de todo lo que viene, aunque no serás 100% consciente hasta el día del parto. Entonces, tus prioridades y tu vida cambian radicalmente.
¿Para este momento tu bebé ya estará colocado con la cabeza hacia abajo (posición cefálica)? No tiene porqué; a veces esto no sucede hasta la 35ª/36ª semana de gestación.
Índice de contenidos
Los cambios en el bebé
El peso del bebé ronda los 1.700 – 1.900 g y su tamaño, de cabeza a pies, es de unos 40 – 41 cm.
Sistema respiratorio
En la 31ª semana, los pulmones son el único órgano mayor que todavía falta por desarrollarse en su totalidad (se produce respiración rítmica, pero aún no están completamente maduros). Esto se debe a la falta de surfactante pulmonar —sustancia que evita que los alvéolos pulmonares se colapsen y permite que se mantengan abiertos.
Sistema nervioso
Sus cinco sentidos están completamente desarrollados. Sin embargo, aún no es capaz de oler (tu olor será el primer aroma que respire, que, por cierto, se convertirá en su favorito). Por otro lado, ya responde al ritmo y a la música y le resulta posible distinguir entre distintos sabores.
¿Qué más atraviesa el bebé esta semana?
El bebé ya es capaz de gesticular e, incluso, puede girar la cabeza de lado a lado. De hecho, a pesar de que duerme períodos de tiempo más prolongados que en semanas anteriores, ¡el peque está lleno de vitalidad y súper activo!
Además, sus extremidades comienzan a estar más proporcionadas, a excepción de su cabeza, que aún es grande en comparación con el resto del cuerpo. A pesar de ello, su aspecto ya es bastante similar al de un recién nacido, solo que algo más pequeño.
Los cambios en la mamá
Útero
En la semana 31 de embarazo, tus órganos internos comienzan a reorganizarse para dejar hueco al útero, cuyo papel es ir haciendo espacio para el gran protagonista: tu bebé.
Concentración y memoria
Es bastante probable también que estés más despistada. Esto es (cómo no) a causa de las hormonas. De esta misma manera, la falta de sueño, la pérdida de energía y las emociones que estás viviendo podrían repercutir en tu capacidad de concentración.
Algunas investigaciones afirman que el cerebro funciona de manera diferente durante el embarazo. Se supone que, durante la gestación, aumenta la actividad en el lado del cerebro asociado a las habilidades emocionales.
Cambios en las uñas
Es común que alrededor de esta semana tus uñas comiencen a secarse y estén más quebradizas de lo normal. Consulta a tu médico qué productos puedes aplicar o tomar para endurecerlas.
Varices
La presión de tu útero sobre las venas de la pelvis y el efecto hormonal pueden producir la aparición de ramificaciones venosas en piernas —arañas vasculares—, e, incluso, varices de distinto calibre y coloración. Es muy probable que esto te provoque dolor y pesadez en las extremidades.
Calostro
Es probable que tus pechos empiecen a prepararse para la lactancia y que generen algo de calostro —también llamado “oro líquido”, es una leche amarillenta y espesa que proporcionará al bebé los nutrientes y calorías necesarios durante sus primeras horas de vida (antes de que se produzca la verdadera “subida de la leche”).
Síntomas comunes
Pruebas y controles
Ecografías
En la 31ª semana de gestación, muchas familias deciden realizar la ecografía 3D, 4D o 5D. En ella se podrá observar al bebé con más detalle: su cara, cómo parpadea, se mueve o se chupa el dedo, sus gestos…
Matroconsejos
- Estreñimiento: Lleva una dieta rica en fibra y continúa con el deporte moderado. Si previenes el estreñimiento, evitarás las molestas hemorroides.
- Señales de parto prematuro: Es importante que conozcas las señales de un parto prematuro. Lo más probable es que tu bebé nazca a término, pero debes aprender a reconocer cuándo acudir al hospital.
- Calostro: Si tus pechos gotean algo de calostro (y te incomodan las manchas que esto pueda dejar) o si tienes pensado dar de mamar a tu peque, compra discos absorbentes y lleva siempre un paquetito en el bolso, por si los necesitaras.
- Sexo: Sigue practicando sexo —a menos que tu ginecólogo te haya puesto restricciones al respecto. La actividad sexual te ayudará a desconectar y a relajarte. Quizá ahora sea un poco más incómodo, por lo que te recomendamos probar diferentes posturas sexuales.
- Movimientos de tu bebé: Desde hace algunas semanas estás notando los movimientos de tu bebé y lo conoces cada vez mejor. Es difícil dar una pauta de movimientos estándar, teniendo en cuenta que cada peque es único. Como mínimo, se acepta la percepción de tres movimientos por hora durante dos horas consecutivas. Pero, ya sientes que hay días que está más tranquilo que otros, igual que a lo largo de un mismo día también varía su patrón de actividad (y se muestra más activo por la noche).
Cuando dudes, quédate tranquila, haz respiraciones profundas para oxigenarlo, toma algo dulce… Seguro que al cabo de unos minutos comienzas a notarlo.
- Varices: Algunas medidas y trucos para aliviar el dolor de las varices son:
- Pasar la menor cantidad de horas posibles de pie
- Utilizar medias de descanso desde primera hora de la mañana
- Darse duchas de agua fría
- Usar zapatos cómodos que no te compriman
- Tomar Vid Roja en forma de grageas (es segura tanto para ti como para tu bebé)
Fuentes
Artículo revisado por MªAngeles Rodríguez Rozalén – Asociación Española de Matronas)
Diplomada Universitaria de Enfermería y especialista matrona por la Facultad de Medicina de Valencia. Ha publicado numerosos artículos en publicaciones de carácter científico y divulgativo, es coautora de Manual de Procedimientos para matronas, Los Consejos de tu matrona y autora de Manual práctico para matronas.
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