Sangrado de implantación

Cabe destacar que este sangrado de implantación a veces pasa bastante desapercibido porque suele ser confundido con la regla. Esto es debido principalmente a que es un sangrado que se produce cuando estamos a punto de menstruar. En el artículo de hoy vamos a enseñarte todo lo que tienes que saber sobre este tipo de sangrado y cómo puedes diferenciarlo de la regla.

¿En qué momento se produce?

Lo más común es que el sangrado de implantación se produzca durante la tercera semana de tu último periodo menstrual, aunque, obviamente el cuerpo de cada mujer es diferente y el comportamiento no es igual en todas, hay mujeres que lo experimentan a la cuarta semana.

El cigoto deberá llevar aproximadamente seis días viajando por las trompas de Falopio en dirección al útero. Cuando la implantación se produce con éxito el momento del sangrado está próximo (tarda un tiempo en que la sangre llegue a la vagina), aunque es importante tener en cuenta que el sangrado no se produce en todas las mujeres independientemente de si la implantación ha tenido éxito.

¿Cómo diferenciar el sangrado de implantación de la regla?

Aunque los síntomas que se sufren son similares a los de la regla, es relativamente sencillo diferenciarlo si se tienen en cuenta estas tres cosas:

• La sangre del sangrado de implantación es diferente al de la regla. No hay coágulos y generalmente la sangre es más oscura, adquiere una tonalidad marrón ya que no se trata de sangre fresca como la sangre de la menstruación.
• El sangrado por implantación no dura tanto como una regla. Dura como mucho un par de días o tres. Pero puede ser incluso más corto, de tan sólo unas horas.
• Se sienten dolores similares a los de la menstruación, pero mucho más leves.

Si aún con estos dos datos, tienes dudas o no eres capaz de diferenciar bien si se trata de un sangrado de implantación o de la menstruación, lo más efectivo es que vayas a una farmacia y adquieras un test de embarazo. Saldrás de dudas.

Por otro lado, también es importante que sepas que existen otros motivos por los que hayas podido tener un sangrado, como por ejemplo una infección vaginal o un cambio en la menstruación, así que si no ha sido una regla, no estás embarazada y has presentado un sangrado, es aconsejable que acudas a tu ginecólogo.