El test de embarazo

Desde hace mucho tiempo las pruebas de embarazo tienen una gran presencia entre nosotras, siendo una de las principales herramientas que usamos para diagnosticar si nos hemos quedado en estado o no. Son métodos sencillos que pueden revelarnos con bastante precisión, y siempre que se hagan bien, si realmente estamos embarazadas o no, pero para ello es importante utilizar los test más precisos y realizarlos según las recomendaciones del fabricante.

Cómo funciona un test de embarazo

Más allá de su diseño y sus colores, los test de embarazo que se venden en las farmacias siguen todos el mismo principio: dentro de sí contienen una tira que reacciona ante la presencia en orina de la hormona hCG, que es producida únicamente por las mujeres que se quedan embarazadas. Al detectar la hormona, la segunda tira del resultado aparece coloreada y de allí resulta el test positivo. Algunos tests son más precisos que otros, e incluso existen algunas versiones que indican de cuántas semanas es el embarazo.

¿Qué tan confiable es el resultado?

En principio, el test no suele fallar cuando da positivo: la efectividad de este resultado es más del 99%. Sin embargo, el test no resulta igual de fiable cuando da un resultado negativo. En hasta el 25% de los casos, puede ocurrir que el embarazo sea muy reciente como para que se llegue a detectar la hormona en orina. Lo mejor, en caso de dudas, es repetir la prueba unos días más tarde.

¿Cuándo conviene hacer la prueba?

Si bien hay tests que sostienen detectar el embarazo hasta algunos días antes de la fecha en que debería venir tu período, lo mejor es esperar a tener un retraso de al menos un par de días para garantizar un resultado más confiable. De la misma manera, los fabricantes de las pruebas caseras de embarazo recomiendan que realices el test con la primera orina de la mañana, para que haya mayor concentración de hCG de haberse producido el embarazo.

El test de embarazo en sangre

Existe una prueba de embarazo mucho más confiable que cualquier test casero, y es la detección de hCG en sangre. En caso de que tu test de embarazo casero dé positivo, o si sigue arrojando un resultado negativo pero quieres quitarte todas las dudas, tu médico te indicará un análisis de sangre para comprobar tu embarazo. El análisis de sangre es mucho más preciso y permite estimar, de acuerdo con la concentración de la hormona, en qué semana del embarazo te encuentras. Es un buen método para estimar una fecha probable de parto incluso cuando tus períodos son irregulares y no estás segura del momento en que se produjo la concepción.