Actividades para hacer entre abuelos y nietos

Muchas veces, abuelos y nietos pasan un día juntos por obligación, es decir, porque sus padres están ocupados y los más peques de la casa tienen que quedarse con los abuelos. Sin embargo, abuelos y nietos deberían también realizar actividades juntos por puro placer, solo por disfrutar de su compañía mutua. Nosotros te proponemos una serie de actividades para que abuelos y nietos se junten y pasen un rato agradable.

7 actividades para realizar entre abuelos y nietos

Reservar un día para realizar actividades conjuntas entre abuelos y nietos tendrá múltiples beneficios para ambos, entre otros, servirá para estrechar lazos familiares y para que grandes y pequeños salgan de la rutina y disfruten juntos de planes interesantes.

Conocer cómo ha sido la vida de los abuelos

Seguro que la vida de nuestros abuelos ha sido apasionante. Hay muchas formas de repasar los momentos más importantes que vivieron: revisando viejas fotografías, investigando y haciendo un árbol genealógico mientras nos hablan de sus antepasados, paseando por lugares que les recuerden a su infancia, explicándonos la función que tenían objetos que ellos utilizaban en el pasado, jugando a aquellos juegos con los que se divertían cuando eran pequeños…

Juegos entre abuelos y nietos

Precisamente esa es la siguiente actividad que te proponemos para pasar un buen día entre abuelos y nietos. Podemos desde redescubrir aquellos juegos de la infancia de nuestros abuelos (canicas, peonza, rayuela…), a estimular la memoria y la creatividad con juegos como el veo, veo o palabras encadenadas, hasta pasar una tarde lluviosa jugando a juegos de mesa (bingo, parchís, oca, dominó, cartas).

Preparar ricas recetas con las que chuparse los dedos

Otras opción es ponernos el delantal y dedicar una mañana o una tarde a preparar deliciosas recetas. Podemos realizar dos platos: uno que nos haga viajar hasta el pasado y saborear cuáles eran los guisos más habituales que comían nuestros abuelos y una receta más “moderna” como hamburguesas, pizzas, sushi… Otra opción es la de que los peques se queden por la noche a dormir en la casa de los abuelos y por la mañana preparar un delicioso y completo desayuno todos juntos.

Pasar el día en el campo

Alejarse de las pantallas, de las consecuencias negativas del sedentarismo y pasar el día al aire libre, en el campo, será beneficioso tanto para los mayores como para los pequeños. Sin duda, nuestro cuerpo y nuestra mente agradecerán el simple hecho de dar un paseo por el campo. Sin embargo, podemos aprovechar la salida para realizar numerosas actividades que gustarán a abuelos y nietos: preparar rutas senderistas sencillas, hacer un picnic, realizar rutas verdes, intentar reconocer el canto de los pájaros, observar animales pequeños, coger hojas…

Visitar un museo que guste a abuelos y nietos

Aunque para algunos niños la palabra “museo” puede ser sinónimo de aburrimiento, en España hay muchos espacios museísticos donde los más pequeños se lo pasarán en grande y, además, en muchos de ellos se realizan actividades para ellos. Entre otros tipos de museos que encantarán a niños (y mayores) estarían aquellos dedicados a los juguetes (en Ibi, Albarracín…), a los cuentos (Urueña), al riquísimo chocolate (Barcelona, Astorga…), a los transportes (Museo del Ferrocarril en Madrid), a los dinosaurios (Asturias, Burgos, Teruel…), planetarios… como puedes ver las opciones son infinitas.

Karaoke con canciones de ayer y hoy

Otras buena opción para que los más pequeños descubran como era la vida hace algunas décadas y que los abuelos se pongan al día con las nuevas tendencias de hoy en día es organizando un karaoke con canciones en el que se mezclen aquellas canciones que escuchaban nuestros abuelos cuando eran jóvenes con las de artistas que han surgido en los últimos años.

Un día como jardineros

Una de las actividades que se pueden realizar entre nietos y abuelos y que de nuevo implica estar al aire libre y respirar aire puro es l de pasar el día realizando labores de jardinería (siempre que los abuelos tengan jardín, claro). Los niños pueden aprender a plantar semillas, reconocer los frutos, regar las plantas…