¿Cómo es parir por segunda vez?

Saber a qué atenerse

Para empezar, por mucho que te haya dolido tu primer parto, ahora ya tienes la certeza de que el dolor se pasa, las contracciones quedan en el olvido y en pocas horas estarás acunando a tu bebé recién nacido y sintiendo que todo ha valido la pena. Incluso algunas mamás que en el primer parto pidieron epidural, eligen ahora parir sin anestesia para saber qué se siente. Vamos, si no hubieras podido sobreponerte al trauma del primer parto, hubiera sido difícil que quisieras reincidir.

Parto más rápido

No te diremos que tu parto será más sencillo, pero sí más corto. Las contracciones suelen ser intensas (igual o más que en el primer parto) pero mucho más efectivas. El cuello del útero se dilata más rápido y la vagina está más elástica, con lo que tanto la fase de dilatación como la de expulsión se acortan significativamente cuando se da a luz por segunda vez. A veces, las mamás se sorprenden cuando su segundo hijo nace después de pujar por pocos minutos, a comparación de las horas de trabajo de parto que puede llevar el primero. Además, esta segunda vez es menos probable que sufras de desgarros o que necesites una episiotomía.

Algunas contras

No todo es más sencillo en el segundo parto. Para empezar, existe un riesgo de hemorragia un poco mayor que en el primero. Por otro lado, los entuertos (esos dolores similares a las contracciones que sientes los días después del parto) suelen durar más y ser más intensos.

Un posparto más cansador

Regresar a casa de la maternidad con tu primer bebé puede ser difícil debido a los miedos de los padres primerizos y la inexperiencia. Todo eso seguramente no ocurra la segunda vez, pero de todas maneras te sentirás aún más agotada si consideras que deberás repartir tu energía entre cuidar al bebé recién nacido y seguir prodigándole atenciones a tu hijo mayor, que seguramente manifieste celos de su hermanito. No podrás descansar cada vez que el bebé duerma pues el ritmo del hogar seguirá siendo el mismo. Y deberás pedir ayuda y delegar tareas como llevar y recoger el niño mayor a la escuela.

Sin embargo, no todo son malas noticias: las mujeres que dan a luz por segunda vez se suelen recuperar más rápido del puerperio y son menos propensas a padecer depresión postparto.