La importancia del desayuno en el embarazo

Algo que escucharás constantemente durante tu embarazo es lo importante que es comer bien y de forma equilibrada. En este sentido, el desayuno se convertirá en uno de los principales responsables para que consigas alimentarte de forma saludable durante los meses de embarazo. Te contamos algunos aspectos a tener en cuenta relacionados con este tema.  

¡Prohibido saltearse el desayuno durante tu embarazo!

Si ya antes de quedarte embarazada tenías la saludable costumbre de dedicarle unos minutos a desayunar, seguramente te resulte más fácil seguir haciéndolo, poniendo especial atención a qué alimentos consumes. Pero si eres de las que se despierta con poco tiempo y no desayunas porque apenas te alcanza para vestirte antes de coger el transporte para ir al trabajo, ahora que estás embarazada es crucial que comiences a desayunar. Durante el embarazo está prohibido saltarse el desayuno, ya que tu cuerpo ha pasado muchas horas sin alimento, y es importante incorporar los nutrientes necesarios para comenzar la mañana con energía. Además, un buen desayuno contribuirá a no caer en la tentación de picar alimentos poco saludables a lo largo de la mañana.

Otro buen motivo para desayunar es prevenir molestias digestivas, como la acidez o la sensación de pesadez en el estómago. Para ello, conviene ingerir mayor cantidad de calorías antes del mediodía, y menos por la noche. Seguramente lo has escuchado muchas veces el conocido refrán que dice “Hay que desayunar como reyes, almorzar como príncipes y cenar como mendigos”.

La clave está en la variedad

No hace falta comer una cantidad exorbitante de comida para desayunar bien. Lo importante es incorporar alimentos de diferentes grupos que aporten las proteínas, vitaminas, fibra, calcio y grasas saludables que nos ayuden a sentirnos bien. Por ejemplo, podemos optar por leche o yogur, huevos, una porción de fruta y algún hidrato de carbono (pan integral o cereales).

Procura evitar las galletas y los bollos, que aportan demasiadas grasas y calorías vacías, los lácteos sin pasteurizar y controla el consumo de café, ya que durante el embarazo no se recomienda consumir más de 200 mg diarios, que equivale a dos tacitas pequeñas.

¿Y si padezco náuseas?

Las náuseas matutinas en el embarazo son un síntoma muy frecuente en el primer trimestre. Si las padeces, seguramente no sientas deseos de desayunar. Pero en realidad deberías hacer lo posible por ingerir al menos una porción pequeña de alimentos, incluso para combatir el malestar y recuperar la energía.

Es preferible comenzar con los alimentos sólidos en lugar del líquido (hay quienes comen algunas galletas saladas antes de levantarse de la cama). Escoge los alimentos salados en lugar de los dulces. Las mejores frutas son las menos ácidas, como el plátano, la sandía o la pera. Otro aliado contra las náuseas del primer trimestre es el jengibre, consumido con moderación. En cuanto a la bebida, es mejor optar por bebidas frías, como zumos de frutas naturales o yogur para beber.

En cualquier caso, siempre es conveniente preguntar a un médico o nutricionista que nos indicará qué alimentos podemos tomar en el desayuno durante el embarazo, dependiendo de las circunstancias de cada embarazada.